Flan Casero Tradicional (¡Cremoso y Delicioso!)

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El flan casero es una de esas joyas de la repostería que evocan recuerdos de la infancia y de las abuelas. Con su textura suave, su capa de caramelo brillante y su sabor dulce y reconfortante, es una de las sobremesas más queridas y sencillas de preparar. Aunque su apariencia puede parecer sofisticada, te sorprenderá lo fácil que es lograr un flan perfecto en casa. ¡Un postre clásico que siempre triunfa!

Información Rápida

  • Tiempo de preparación: 20 minutos
  • Tiempo de cocción: 45-60 minutos (al baño María)
  • Tiempo de enfriado: Mínimo 4 horas (idealmente toda la noche)
  • Porciones: 6-8 porciones
  • Dificultad: Fácil

Ingredientes

Para el Caramelo:

  • 1 taza de azúcar
  • 1/4 taza de agua

Para el Flan:

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  • 1 lata (400ml) de leche condensada
  • 1 lata (400ml) de leche evaporada (o la misma medida de leche entera)
  • 4 huevos grandes
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla

Modo de Preparación

  1. Precalentar y Preparar el Horno: Precalienta el horno a 180°C (350°F). Pon a hervir agua en una olla grande, la necesitarás para el baño María.
  2. Hacer el Caramelo: En una flanera (molde para flan) metálica o molde apto para horno (de unos 20-22 cm de diámetro) y paredes altas, añade la taza de azúcar y el 1/4 de taza de agua. Coloca la flanera directamente sobre fuego medio (o en un cazo si la flanera no es apta para fuego directo). Deja que el azúcar se disuelva y hierva sin remover. Observa atentamente cómo el caramelo toma un color dorado. Una vez que tenga un color ámbar claro, retira del fuego y mueve la flanera inclinándola para que el caramelo cubra uniformemente el fondo y un poco los lados. ¡Cuidado, el caramelo está muy caliente!
  3. Preparar la Mezcla del Flan: En un bol grande, bate ligeramente los 4 huevos. Añade la leche condensada, la leche evaporada (o leche entera) y el extracto de vainilla. Mezcla bien con unas varillas hasta que todos los ingredientes estén completamente integrados y la mezcla sea homogénea. No batas en exceso para evitar la formación de mucha espuma.
  4. Colar la Mezcla: Opcionalmente, puedes colar la mezcla del flan con un colador fino para eliminar cualquier grumo de huevo o espuma, esto ayudará a obtener una textura más suave.
  5. Verter en el Molde: Con cuidado, vierte la mezcla del flan sobre el caramelo ya endurecido en la flanera.
  6. Cocinar al Baño María: Coloca la flanera dentro de una fuente para horno más grande. Vierte el agua hirviendo (que preparaste al principio) en la fuente grande, hasta que cubra al menos la mitad de la altura de la flanera.
  7. Hornear: Lleva con cuidado la fuente al horno precalentado y hornea durante 45-60 minutos, o hasta que el flan esté cuajado pero aún ligeramente tembloroso en el centro. El tiempo puede variar según tu horno.
  8. Enfriar y Refrigerar: Retira la fuente del horno. Con cuidado, saca la flanera del baño María y déjala enfriar completamente a temperatura ambiente. Una vez frío, cubre la flanera con film transparente y refrigera por al menos 4 horas, o idealmente toda la noche. ¡Es crucial que esté bien frío antes de desmoldar!
  9. Desmoldar: Para desmoldar, pasa un cuchillo fino por el borde del flan para despegarlo suavemente. Luego, coloca un plato de servir sobre la flanera y, con un movimiento rápido y seguro, inviértela. El flan se deslizará y el caramelo líquido bañará la parte superior.

Consejos del Chef

  • No Mover el Caramelo: Al hacer el caramelo, resiste la tentación de removerlo con una cuchara. Solo gira la flanera para distribuir el calor y el caramelo. Si se cristaliza, puedes añadir una cucharada de agua y seguir calentando suavemente.
  • Baño María: Asegúrate de que el agua del baño María no hierva con demasiada fuerza en el horno, ya que podría salpicar y entrar en el flan. Un hervor suave es suficiente.
  • No Batir Demasiado: Mezcla los ingredientes del flan solo hasta que estén combinados. Un exceso de batido introduce mucho aire, lo que puede resultar en un flan con burbujas en lugar de una textura lisa.
  • Refrigeración: La paciencia es clave para un flan perfecto. Necesita enfriarse completamente para cuajar bien y que el caramelo se vuelva líquido al desmoldar.