ANÚNCIO
Las milanesas de pollo son un clásico indiscutible en muchas cocinas. Crujientes por fuera, tiernas y jugosas por dentro, son perfectas para cualquier ocasión: desde una comida familiar hasta un sándwich rápido. Aunque parezca complicado, te sorprenderá lo fácil que es preparar unas milanesas caseras espectaculares que superarán con creces las compradas. ¡Prepara tu plato favorito con este paso a paso sencillo!
Información Rápida
- Tiempo de preparación: 20 minutos
- Tiempo de cocción: 10-15 minutos
- Porciones: 4 milanesas
- Dificultad: Fácil
Ingredientes
- 2 pechugas de pollo, sin hueso y sin piel
- 1 taza de pan rallado (puedes usar pan rallado japonés Panko para extra crujiente)
- 1/2 taza de harina de trigo (todo uso)
- 2 huevos grandes
- 1 cucharada de leche (o agua)
- 1/2 cucharadita de ajo en polvo
- 1/2 cucharadita de pimentón dulce (paprika)
- Sal al gusto
- Pimienta negra recién molida al gusto
- Aceite vegetal (para freír, suficiente para cubrir la mitad de las milanesas)
- Opcional: Perejil picado a la mezcla de pan rallado.
Modo de Preparación
- Preparar las Pechugas: Coloca las pechugas de pollo en una tabla de cortar. Corta cada pechuga horizontalmente por la mitad para obtener filetes más finos. Cúbrelos con film transparente y golpea suavemente con un mazo de cocina (o un rodillo) hasta que tengan un grosor uniforme de unos 0.5 cm. (Esto asegura una cocción pareja y una milanesa más grande).
- Sazonar el Pollo: Sazona ambos lados de los filetes de pollo con sal y pimienta.
- Preparar el Empanado (3 Platos):
- Plato 1 (Harina): Vierte la harina en un plato.
- Plato 2 (Huevo): En otro plato hondo, bate los 2 huevos con la cucharada de leche (o agua), una pizca de sal y pimienta.
- Plato 3 (Pan Rallado): En un tercer plato hondo, mezcla el pan rallado con el ajo en polvo y el pimentón dulce. Si usas perejil, agrégalo aquí.
- Empanar las Milanesas:
- Pasa cada filete de pollo primero por la harina, cubriendo bien por todos lados y sacudiendo el exceso.
- Luego, sumérgelo en el huevo batido, asegurándote de que esté bien cubierto.
- Finalmente, pásalo por el pan rallado, presionando suavemente para que se adhiera bien por ambos lados. Coloca las milanesas empanadas en una bandeja y refrigera por 10-15 minutos (opcional, pero ayuda a que el empanado se adhiera mejor).
- Freír las Milanesas: Calienta suficiente aceite vegetal en una sartén grande a fuego medio-alto (debe haber al menos 1-2 cm de aceite). Cuando el aceite esté caliente (puedes probar con un poco de pan rallado, si burbujea, está listo), fríe las milanesas en tandas para no bajar la temperatura del aceite.
- Cocción: Fríe por 3-5 minutos por cada lado, o hasta que estén bien doradas, crujientes y el pollo esté completamente cocido por dentro (los jugos deben salir claros).
- Escurrir: Retira las milanesas de la sartén y colócalas sobre papel de cocina para absorber el exceso de aceite.
- Servir: Sirve las milanesas calientes, solas, con una ensalada, patatas fritas o un poco de zumo de limón exprimido por encima.
Consejos del Chef
- Panko para Crujiente: Si quieres unas milanesas súper crujientes, usa pan rallado japonés Panko.
- Temperatura del Aceite: Es crucial que el aceite esté a la temperatura adecuada: si está frío, el empanado absorberá demasiado aceite; si está demasiado caliente, se quemará por fuera antes de que el pollo se cocine por dentro.
- No Amontonar: Fríe las milanesas en tandas para no bajar la temperatura del aceite. Si la sartén está abarrotada, la temperatura bajará y las milanesas quedarán blandas.
- Aplanar Bien: Aplanar el pollo no solo ayuda a una cocción uniforme, sino que también las hace más tiernas.
